Cada vez somos más conscientes de la necesidad de ser ayudar al ambiente y hoy en día muchos de nosotros hacemos cosas básicas, como reciclar basura. Sin embargo, si miramos el panorama más amplio, hay muchas formas diferentes de aprender a ser más conscientes de nuestro entorno y adoptar un modo de vida más sostenible. En este artículo te daremos algunos consejos para tener un hogar más amigable con el ambiente.
Revisa estos 25 tips para tener el hogar ideal
Invierte en bombillas de bajo consumo
Aunque las bombillas de bajo consumo existen desde hace bastantes años, sólo en los últimos años el público ha empezado a informarse sobre su eficiencia y sobre cómo pueden ahorrar dinero en el hogar. No sólo consumen menos electricidad, sino que no es necesario sustituirlas con la frecuencia que lo hacían las bombillas normales de toda la vida.
Instala paneles solares
Para cualquier hogar que quiera ser realmente amigable con el ambiente, los paneles solares son un elemento esencial. Son una inversión a largo plazo, y aunque habrá una disposición inicial de dinero, a largo plazo podrías ahorrar más dinero del que gastas.
Aísla bien tu casa
Una casa bien aislada retiene el calor de forma adecuada, lo que significa que necesitará menos energía para seguir calentando tu espacio vital cuando realmente lo necesites. Esta es una de las formas más inteligentes de ahorrar dinero.
Aplica la limpieza verde
Los detergentes y productos de limpieza comunes están hechos de químicos dañinos que una vez que se han tirado por el desagüe, van a parar al suministro de agua y a menudo se necesita más energía y trabajo para purificar el agua de nuevo en las plantas de tratamiento.
El bicarbonato de sodio, el zumo de limón o el vinagre pueden sustituir los productos fuertes y al detergente para eliminar las bacterias y dejar los hogares libres de grasa y olores.
Haz abono con residuos de comida
Convierte los residuos de comida y los restos de la cocina en compost. Deposita en ellos los restos de comida o los alimentos viejos y déjalos reposar. Con el tiempo se convertirá en un abono útil que puede utilizarse en el jardín.
Reutiliza el aceite
Es importante aprender que el aceite no debe tirarse por el desagüe, ya que este termina llegando al mar y es muy contaminante. En función de lo que hayas cocinado, puedes usarlo en más de una ocasión. Es muy práctico tener una botella a mano para acumular el aceite y luego llevarlo a un punto limpio para reciclarlo como debe ser.
Evita el uso de la secadora
Siempre que puedas tiende la ropa al aire libre (o dentro de casa). Según Greenpeace, “las secadoras emiten cerca de 300 kilos de CO2 al año, a la vez que gastan unos 40 kWh”.
Ahorra el agua
Ahorra agua y cuando te duches no dures más de 5 minutos. Al bañarnos podemos estar despilfarrando hasta más de 100 litros de agua.
0 botellas de plástico
Depositar la botella de agua de plástico en el contenedor de reciclaje no compensa el hecho de que se esté utilizando una botella de plástico. Las botellas que se tiran tardan más de 1.000 años en biodegradarse. Compra una botella reutilizable y salvarás el medio ambiente con cada sorbo.
Limita el uso de los aparatos electrónicos
Es difícil evitar la tentación de la tecnología, especialmente cuando llegas a casa después de un largo día de trabajo y quieres relajarte. Pero si quieres reducir tu huella de carbono, deberías intentar mantener el uso de los dispositivos al mínimo.
Apaga las luces
Apagar las luces es un acto sencillo que da para mucho. Evita tener todas las luces prendidas si sólo estás usando algunas. Además de ahorrar dinero en pago de electricidad, estarás contribuyendo con el planeta.
Lava la ropa con agua fría
Lo creas o no, casi el 90% de la energía que utiliza una lavadora se destina a calentar el agua. Si ajustas el agua fría en tu lavadora, puedes eliminar hasta 1.600 libras de emisiones de dióxido de carbono al año.
Decora con plantas de interior
El cuidado de las plantas de interior requiere bastante responsabilidad. Como es sabido, las plantas absorben el dióxido de carbono del ambiente y lo transforman en oxígeno por medio del proceso de la fotosíntesis.
Reutiliza las bolsas de la compra
Las bolsas de papel se pueden reutilizar al menos tres veces para compensar sus efectos medioambientales en comparación con los de las bolsas de plástico. Y las bolsas de algodón reutilizables tienen que utilizarse al menos 131 veces para compensar el impacto ambiental de una bolsa de plástico.
Cultiva productos en un jardín
Un hábito alimentario ecológico puede ser empezar a cultivar tus propios productos. Al cultivar tus propios alimentos, eliminas las emisiones procedentes del transporte de mercancías a tus mercados locales y a las tiendas de comestibles de masas.
Utiliza un termostato programable
La instalación de un termostato programable para controlar eficazmente los sistemas de calefacción y refrigeración puede reducir tu factura de calefacción hasta un 15% al año.
Usa servilletas de tela
Una servilleta de tela puede durar años en tu familia. Sólo es cuestión de lavarlas adecuadamente.
Consigue regletas de enchufes
Compra una regleta y apágalas cuando termines de usar las cosas que están enchufadas. Todo, desde los televisores hasta los cargadores de teléfonos que no están enchufados a un celular, absorbe energía mientras no se usa.
Reutiliza el agua para regar
El agua con la que lavas las verduras o la que se acumula en un cubo junto a la puerta después de la lluvia puede servir para regar las plantas de tu jardín.
Evita el ascensor
Si vives en un edificio de apartamentos, usa las escaleras cada vez que puedas.
Limpia y regala
Puedes hacer una limpieza en tu hogar donde saques ropa, muebles y todo aquello que puedas donar o regalar a quienes más lo necesiten.
Llena el lavavajillas hasta el final
Si no puedes esperar, ponlo en la posición de «sólo rejilla superior» que tienen muchos de ellos en lugar de hacer un ciclo completo sólo para cuatro copas de vino.
Abre las ventanas
Abrir las ventanas por la noche durante los calurosos meses de verano, cerrarlas y bajar las persianas por la mañana es una forma gratuita de refrescar la casa. Si se trata de un gasto mayor, cambia las ventanas por otras de alto rendimiento y eficiencia energética con un valor U (o índice de transferencia de calor) bajo.
Usa la recuperación de calor
Los sistemas de recuperación de calor aprovechan la energía existente en su hogar y maximizan sus beneficios. Básicamente, estos sistemas sustituyen a los ventiladores del baño por un sistema de ventilación que extrae el aire caliente del baño, lo filtra y lo utiliza para mantener el calor en los dormitorios y los espacios habitables.
Cuidar de la Tierra es importante para nuestro bienestar, pues esta nos proporciona el equilibrio necesario para tener una vida plena. Convertir nuestros hogares en un espacio amigable con el ambiente es el primer paso para crear un mundo mejor a nuestro alrededor.
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Referencias bibliográficas: