Los que desarrollan una cultura ahorrista siempre destinan un porcentaje de sus ingresos para aumentar sus ahorros, pero ¿cuál es el porcentaje ideal para ahorrar? ¿10 %?, ¿20 %?, ¿25 %?
Los expertos en finanzas sostienen que el porcentaje de ahorro ideal se logra con hábitos sanos de ahorro, aunque resulta algo difícil para aquellos que ganan un salario mínimo y requieren cubrir gastos obligatorios como el alquiler y la comida.
Pero, lo verdaderamente importante es contar con un plan de ingresos y gastos que contemple un porcentaje específico para cada cosa, y de esta forma no gastar más de lo necesario.
Mensualmente, podemos tener el antojo de darnos un capricho, y esta posibilidad se hace más fuerte cuando tenemos el dinero en nuestra cuenta bancaria.
La mejor manera de generar un ahorro fructífero es organizando nuestros gastos e ingresos. Pero, ¿qué porcentaje de nuestro sueldo deberíamos ahorrar?
Las metas de ahorro suelen ser indispensables para que nuestro cerebro entienda que debe centrarse en la creación de un fondo de emergencia para recurrir a él, o para cualquier otro fin de relevancia.
Lo ideal es alcanzar un equilibrio financiero que permita invertir lo que ganas sólo en gastos necesarios, ahorrar y, al mismo tiempo, tener un monto para gastar libremente.
Porcentaje ideal: 50/30/20
El sistema 50/30/20 es una fórmula sencilla para que destines un porcentaje del salario a los gastos, sin poner en riesgo las finanzas, y garantizar el ahorro. ¿Cómo funciona esta fórmula de ahorro? El 20 % de los ingresos son para ahorros y seguridad social, 50 % para necesidades básicas y el 30 % para gustos personales o metas.
50 % para gastos esenciales
La máxima partida de los ingresos estará destinada a los alimentos, el arrendamiento de vivienda, hipotecas de vivienda o vehículos, prima de seguro privado, pago de cuota del crédito y tarjetas bancarias, transporte y servicios públicos.
30 % para gustos personales o metas
En esta partida se incluyen: deseos personales, hobbies o pesatiempos, ropa y accesorios, membresías o suscripciones, viajes o paseos, deudas emergentes o cualquier pago que desees realizar que no sea indispensable.
20 % para el ahorro
Este porcentaje es ideal para comenzar a ahorrar, aunque puede ir en aumento según tus posibilidades. Puedes fijarte metas de ascenso; como, por ejemplo: cada seis meses incrementar el porcentaje en un 5 % hasta llegar al 30 % o al 50 %, y acelerar el cumplimiento de las metas u objetivos. Este fondo de ahorro puede establecerse para: inversión, pensión, o un fondo de emergencias.
En esta partida puedes priorizar o establecer subpartidas, por ejemplo: 50 % para compra de vivienda, 30 % emprendimientos o inversiones, 20 % para jubilación o pensión de retiro. Ordénalas según tus prioridades e intereses.
Ahora que ya conoces la manera en que puedes distribuir tus ingresos, es el momento para poner en marcha tu plan de acción. Asegúrate de añadir los plazos de tiempo de ejecución desde una perspectiva realista, lógica y objetiva. Nos vemos en la siguiente edición, ¡no olvides contactarnos en nuestras redes sociales!
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