Para alcanzar objetivos financieros es necesario seguir algunos pasos importantes. ¿Sabes cuáles son? Empecemos por fijarnos objetivos realistas.
En muchos casos, las personas establecen metas financieras demasiado ambiciosas que no se basan en su realidad particular.
Cuando creemos que no podemos alcanzar nuestras metas, tendemos a desanimarnos y rendirnos. En las próximas líneas, te contamos más al respecto para establecer metas alcanzables y adaptadas a tu situación.
Revisa objetivamente las finanzas
Si examinas con detenimiento tus finanzas y estás claro de lo que es verdaderamente importante para ti, podrás elaborar un plan que te sirva de guía para transitar una ruta financiera viable.
Comienza con crear un plan de avance práctico y sencillo para aplaudir logros pequeños pero valiosos a corto plazo. Reparte el éxito en fracciones y, a través del progreso constante y la perseverancia, antes de que te des cuenta, estarás logrando lo que antes te parecía una misión imposible.
Estudia a profundidad tu situación financiera actual
Analiza tu situación financiera actual de manera crítica; trata de generar ideas y soluciones a las posibles causas de las fallas que has detectado últimamente. Anota lo positivo y lo negativo de tu situación financiera, y concibe sólo aquellas metas que podrían ser realizables tras el análisis.
Consulta tus ingresos y gastos
Saber de dónde provienen tus ingresos y en qué los gastas o inviertes es un paso importante para detener un poco la salida descontrolada de dinero.
Esquematiza tus ingresos y gastos fijos y variables. Esto te brinda una imagen clara del flujo de caja y tus hábitos de consumo. Chequea todos los gastos que puedan reducirse o eliminarse.
Sistematiza todas sus deudas, como hipotecas, préstamos para automóviles, tarjetas de crédito, etc. Calcula tus cuotas mínimas junto con los intereses para saber qué parte de tu presupuesto puedes destinar para amortizar la deuda. Prioriza las deudas con altas tasas de interés a la hora de pagarlas.
Controla tus ahorros e inversiones
Revisa cuánto dispone tu fondo de emergencia, cuentas de jubilación y otros medios de inversión. Ten en cuenta que tus ahorros deben cubrir al menos de 3 a 6 meses de gastos en caso de pérdida del empleo o momentos de crisis financieras.
Establece objetivos específicos y medibles
Si conoces tu situación financiera, puedes establecer objetivos específicos, como liquidar tu tarjeta de crédito, ahorrar para el pago inicial de un apartamento o jubilarte antes de los 65 años.
Adjunta un cronograma y añade cifras medibles a tus objetivos. Comienza con pequeñas metas alcanzables y emprende a partir de allí.
Dale un seguimiento a tu progreso periódicamente y ajusta tus proyecciones y presupuesto, si es necesario. Con disciplina y determinación, podrás lograr grandes metas financieras, tranquilidad e independencia económica. El éxito está al alcance de tu mano cuando comienzas con un plan realista. Síguenos en redes para asesorarte en la consecución de tus metas financieras.